Mediante sensores instalados en las naves, se capturan y analizan las vocalizaciones de los pollos, permitiendo a la IA procesar grandes volúmenes de datos y generar predicciones precisas. Estas herramientas tecnológicas no solo permiten anticipar el peso de las aves con cuatro días de antelación, sino que también mejoran su bienestar desde la incubación hasta la crianza.
Javier Lacalle, director de Ganadería del Grupo AN, destaca la importancia de estas tecnologías: «La IA nos ofrece un recurso fundamental para asegurar la competitividad y la eficiencia operativa.» Con la bioacústica, se pueden detectar los niveles de estrés y bienestar de las aves, optimizando las condiciones de crianza y reduciendo el desperdicio.
Desde la incorporación de la IA y la bioacústica, se ha logrado una precisión sin precedentes en la predicción del peso de los pollos, con un margen de error inferior al 2%.
Grupo AN
Además, estos avances permiten establecer estándares para cada manada, ajustando parámetros como la humedad, temperatura y luz, garantizando así el máximo bienestar animal.
Aprovecha estos avances tecnológicos para mejorar tus operaciones avícolas y mantenerte a la vanguardia de la industria alimentaria. La combinación de inteligencia artificial y bioacústica está aquí para revolucionar la manera en que cuidamos y gestionamos nuestras granjas.