En un mundo en constante evolución, la industria del packaging se enfrenta a un desafío crucial: equilibrar la sostenibilidad con la funcionalidad en un panorama en constante cambio.
Según una encuesta internacional realizada por Industrial Physics, el 96% de los profesionales del embalaje muestran un gran interés por impulsar innovaciones en los envases que prometan un futuro más verde. En este proceso de transformación de la industria del packaging, la reciclabilidad, la reducción de residuos y los materiales biodegradables se han convertido en focos de inversión clave.
En dichas encuestas, un 60% de los profesionales del packaging afirmó que deciden optar por reducir y sustituir el plástico, no solo por su sostenibilidad, sino también debido a su aceptación por parte de los consumidores.
Alternativas al plástico en la industria del packaging
La sustitución del plástico por materiales alternativos es un cambio fundamental, pero no exento de desafíos. La transición al papel, aparentemente sostenible, en el envasado de alimentos, por ejemplo, requiere recubrimientos que, a pesar de mantener la calidad y seguridad del producto, eliminan la reciclabilidad y pueden ser perjudiciales para el medio ambiente.
El tereftalato de polietileno (PET) se destaca como una alternativa popular al plástico virgen en la industria de bebidas, ya que se puede reciclar hasta diez veces y reduce un 79% las emisiones de gases de efecto invernadero. Sin embargo, la falta de uniformidad en los procesos de reciclaje y la liberación de microplásticos en ciertos lugares siguen siendo desafíos. Además, los polímeros reciclados, como el rPET, están ganando popularidad, pero su variabilidad en el proceso de prueba requiere una mayor inversión de tiempo y dinero para garantizar la seguridad y calidad del embalaje, lo que contrasta con el objetivo de reducir el costo del embalaje.
La elección de materiales sigue siendo fundamental para los fabricantes de envases, pero la rápida evolución de nuevos materiales plantea desafíos en términos de estándares de calidad. Más pruebas e inversión son necesarias para comprender el comportamiento de estos materiales y desarrollar las normas adecuadas.
La reducción y el reemplazo del plástico continuarán siendo un tema candente, y se espera que la colaboración en la industria y la acumulación de datos permitan abordar estos desafíos en el camino hacia un futuro más sostenible en el mundo del embalaje.