El hydroforming es un proceso de fabricación usado principalmente en la industria metalúrgica y automotriz para dar forma a metales utilizando líquidos a alta presión.
Este proceso permite la creación de piezas con formas complejas, manteniendo la resistencia del material y reduciendo el número de piezas que se necesitan ensamblar.
Paso a paso del hydroforming
Fuente: AminoNorthAmerica. Proceso de hidroformado.
- Preparación del material: Se selecciona una lámina o tubo de metal que será colocado en un molde específico diseñado para la pieza deseada.
- Colocación en el molde: El metal se pone dentro de un molde que tiene la forma que queremos conseguir.
- Aplicación de presión hidráulica: Se inyecta agua a muy alta presión dentro del molde, lo que hace que el metal se expanda y tome la forma del molde.
- Retira el metal: Una vez que el metal ha tomado la forma deseada, se drena el agua y se saca la pieza ya formada.
- Acabado: Dependiendo de la pieza, se pueden hacer algunos ajustes, como cortar o pulir, para dejarla lista.
¿Qué materiales se pueden utilizar en el hydroforming?
La resistencia del acero inoxidable a la corrosión y su capacidad para mantener su integridad estructural bajo condiciones extremas lo hacen ideal para una gran variedad de aplicaciones, desde la fabricación de piezas automotrices hasta componentes en la industria alimentaria.
Además, el acero inoxidable es relativamente fácil de moldear con este proceso, consiguiendo crear piezas con formas muy precisas y complejas.
El aluminio es conocido por ser muy ligero y a la vez resistente, lo que lo convierte en la elección perfecta cuando se necesitan piezas que mantengan una buena relación resistencia-peso.
Por otro lado, su maleabilidad hace que se puedan crear piezas complejas con facilidad.
El cobre es otro material que se puede moldear fácilmente mediante hydroforming. Es muy utilizado en la industria eléctrica y de la fontanería gracias a sus excelentes propiedades conductivas y su resistencia a la corrosión.
El hydroforming permite crear piezas de cobre con formas específicas, ideales para adaptarse a sistemas eléctricos o de tuberías complejas.
El latón, que es una aleación de cobre y zinc, también se usa aquí por su capacidad para resistir la corrosión y su atractiva apariencia.
Este material es muy maleable, lo que permite darle forma fácilmente con presión hidráulica.
En cuanto a sus aplicaciones, se usa en elementos decorativos o accesorios de plomería.
Además de los metales más comunes, el hydroforming también se usa con aleaciones de alta resistencia que combinan varios metales para obtener propiedades específicas, como mayor durabilidad, resistencia a la fatiga o mejor resistencia al calor.
Estas aleaciones se emplean cuando las aplicaciones necesitan un rendimiento superior bajo condiciones extremas, como en la industria energética o en aplicaciones militares.
Si estás interesado en utilizar el hydroforming en tu negocio o proyecto, en Maquinaria y Componentes podemos recomendarte empresas especializadas que tengan experiencia y maquinaria avanzada para llevar a cabo este tipo de procesos.
